SAGARPA certifica maíz híbrido generado por Semillas y Agro productos Monsanto S.A. de C.V. bajo la supervisión del Servicio Nacional de Inspección y Certificación de Semillas S.A. de C.V.
Se regalan estas semillas a agricultores de José María Morelos.
Quintana Roo, México. 3 de diciembre de 2013
Agricultores están molestos, otros asustados y preguntándose que hacer. En la región tienen variedades nativas de maíz milenarias. Han perdido sus cosechas, pero no sus reservas de maíz, por las condiciones climáticas que se han presentado en los últimos meses. Hay maíz rojo, azul, morado, blanco y amarillo, cada uno con su nomenclatura maya.
Parte de la población está consciente de que el maíz híbrido es más débil que el maíz nativo o también llamado criollo. El problema es que hay una parte que no está consciente de esto y es la vulnerable a adquirir todo el paquete que venden las compañías que generan estas semillas dependientes de agro-químicos. Las semillas no funcionan de manera óptima si no se adiciona a la planta con los productos químicos que las mismas compañías sugieren utilizar y venden.
Lean la bolsa con detenimiento y verán que el mayor riesgo es que al momento de sembrarlas el polen de esas plantas de maíz híbrido es acarreado por el viento a milpas vecinas de maíz nativo y se combinan los genes de las 2 especies de maíz. Entonces la semilla que resulte de la cosecha de la milpa de maíz nativo contendrá la información genética PATENTADA por la compañía que generó las semillas que están regalando, así que el productor de maíz antes nativo podrá ser sancionado por la compañía u obligado a destruir las semillas porque podría ser procesado jurídicamente por almacenarlas y venderlas.
NO APTA PARA ALIMENTO
Maíz certificado de variedad HS-55, producida en Sinaloa por Semillas y Agro productos Monsanto S.A. de C.V. Beneficiada en Los Mochis, Sinaloa.
ENTRA AL LINK: El cártel del agro
CELEBRAMOS EL PRIMER ANIVERSARIO del Ecotianguis Alternativo y de Trueke
Benito Juárez, Quintana Roo, México. 22 y 23 de febrero de 2014
El día celebraba con nosotros, el sol se despertaba brillante anunciando alegría. Los patos cantaban y las cabras se acicalaban preparándose para los incesantes halagos que recibirán de la gente que visitaría el Centro Eco Natural en la colonia Avante. ¡Estábamos de fiesta! Ha trancurrido un año de reunirnos el último domingo de cada mes en Plaza Bonita a hacer trueke por medio de nuestro facilitador Xcan y de transformarnos poco a poco en prosumidores, por fin, celebraríamos el primer aniversario del Ecotianguis Alternativo y de Trueke de Cancún.
La comunidad del Ecotianguis terminaba de preparar todo; pendones y telas colgaban en la explanada producto de intensos días de trabajo en comunidad. La comida se estaba terminando de cocinar en las distintas casas de la red; tamales de champiñones y mole, ceviche de coco, tabule, frijoles, dulce de camote y calabaza eran algunas de las delicias que se ofrecieron. La red del Ecotianguis había planeado meticulosamente la degustación con productos orgánicos para hacer de este día, uno perfecto.
La noche anterior, algunos miembros pasaron la noche acampando entre humo de fogata y piedras mal acomodadas. Había sido una noche de encuentro entre colectivos cuya labor se enfoca en pos de la Economía Solidaria y la Soberanía Alimentaria. Vinieron colectivos de muchas partes; Chiapas, Puerto Morelos, Túlum, Playa del Carmen, José María Morelos, Yucatán y muchos más. Compartimos y departimos animosamente, acompañados de tepache kéfir, enfrijoladas y muchas risas.
Para quitar malestares, la mañana empezaría con una clase de Yoga que la maestra Kumiko del Cenro Anahata impartiría, y también, Charly “el ajustador de antenitas” nos obsequiaría una clase de Aquichido, un arte marcial. Él mismo, en esos 3 días, daría a todo aquel que lo solicitara, un ajuste de huesos y chakras, un servicio completo de alineación y balanceo-.
Las personas empezaron a llegar poco a poco. Los peques corrían de un lado a otro emocionados de convivir con la naturaleza, de jugar en el trampolín y acariciar a las cabras, y así, el día se fue entrelazando entre mucha diversión, palabras de sabiduría, música, saberes invaluables y experiencias nuevas.
Los pequeños aprendieron entre juegos sobre permacultura con el Instituto Ná Lu’um, construyendo un hogar para los seres mágicos de la selva, y los grandes, también se divertían como chicos construyendo un huerto Ecosistémico.
Hubo muchas opciones de aprendizaje, diferentes talleres impartidos por varias redes y colectivos, como el panel de Igualdad y Equidad de género que dieron socias de UniCoop, el taller de trofología del Jardín orgánico 13:20, el taller de papel mache impartido por Bárbara y el curso de germinados con el centro Bio Orgánico.
En la cocina al calor del fuego y acompañado de una buena conversación, las personas moldeaban el barro para crear piezas únicas en una clase muestra de alfarería impartido por Odilvina.
En todo el lugar había gente platicando, conociendo y aprendiendo. En la gruta del cenote las personas tenían que pedir permiso para entrar -no faltó el incrédulo que se negó a hacerlo y misteriosamente resbalo dentro del lugar- en este bello espacio, que sirve de auditorio para música de sanación se congregaron las personas para abrirse a experiencias diferentes, los pequeños nadaban, mientras las mujeres en sororidad hablaban en confianza sobre la femineidad y la luna, sobre los retos de la maternidad, la menstruación y el trabajo personal que lleva a la sanación.
Los sabios mayas nos compartieron su energía, invocando a los cuatro puntos cardinales para agradecer por la abundancia y bendecir las semillas que intercambiaríamos. Las semillas son la potencialidad de la vida manifestada en un pequeño cuerpo, nosotros invocábamos para replicar esa vida, diseminarla y compartirla. Entre copal y oraciones en maya, los corazones de los asistentes se unieron en un suspiro hermanado para agradecer a la madre naturaleza por todas las bendiciones y después se prosiguió a hacer el intercambio, algunos como Eco huertos regalaron semillas para multiplicarlas.
Los intelectuales del colectivo, y también los no tan intelectuales, se reunieron en círculo en diferentes espacios para hablar de temas de vital importancia, como los Transgénicos y la contaminación de los alimentos y su afectación en la apicultura, y sobre la Economía Solidaría, un intercambio primordial donde las personas pudieron aclarar dudas, informarse y lo más importante, involucrarse.
Como ninguna celebración está completa sin música tuvimos la participación de un grupo de música y danza prehispánica que escenificó un breve recorrido por la historia de México, todo un deleite para los sentidos. El Grupo Cuzam fusionó instrumentos tradicionales y prehispánicos con los modernos.
Casi para cerrar el evento vimos los documentales del Túmin de la joven directora Melissa Elizondo y el de Un poquito de Agua de Francisco Betancourt quien nos acompañó con su presencia para debatir y comentar su producción.
Entre abrazos, risas y muchos aplausos, terminamos la jornada del festival de celebración, todavía festejaríamos el día siguiente en plaza bonita haciendo el Ecotianguis como la hacemos cada último domingo de cada mes, pero nuestra comunidad ya era más grande, ya se había alimentado de la energía de todas cada una de esas personas maravillosas que celebraron con nosotros, que crecieron y se alimentaron con la propuesta de generar una economía distinta, una forma de generar abundancia, de vivir y ser más congruentes formando comunidad.
Este evento fue planeado, organizado y financiado con el esfuerzo de todos y todas, es una muestra del poder que tenemos en colectivo de concretar y construir para nuestro beneficio, por eso a todas y todos los que apoyaron, ¡gracias!.
ecotianguis cancun 